Con las navidades a la vuelta de la esquina a muchos se nos bloquea la mente tratando de elegir el regalo más idóneo. Y muchas marcas de bebidas espirituosas tiran de marketing, precisamente en estas fechas, para ofrecer algunas sugerentes propuestas con las que quedar bien. Aquí vamos a hablar de algunas de ellas, aunque no lo haremos desde el punto de vista del contenido, sino del continente. Me explico: existen numerosas ediciones especiales, algunas de ellas verdaderamente caras, de licores y destilados que se pueden conseguir en tiendas gourmet y distribuidores especializados. Pero lo que aquí queremos indicar son aquéllos que forman parte del ecosistema habitual de bebidas y para los que las marcas han ideado curiosas formas de presentación, ya sea con un envase nuevo, una botella personalizable o un bonito estuche.
Pongamos un ejemplo. En cualquier momento del año puedes comprar una botella de whisky Cardhu, y existen muchos bebedores de whisky que consideran Cardhu como su marca favorita. Si buscas un regalo para uno de ellos, puedes apostar por un nuevo pack que Cardhu acaba de lanzar al mercado. No se trata de un whisky nuevo. En realidad es el mismo Cardhu de siempre, con la salvedad de que se presenta en un bonito estuche de piel, lo que resulta muy indicado como propuesta de regalo. Hay dos modelos. El precio para el Single Malt 12 años es de 24,99 euros, mientras que para el Special Cask Reserve, en estuche de piel azul, el precio es de 35,84 euros, según datos facilitados por Diageo. Es bonito, es original, no es caro… y además no supone ningún riesgo de que el producto no vaya a gustarle al destinatario del regalo, ya que se trata del mismo whisky Cardhu de siempre, el que consume a lo largo de todo el año. Evidentemente muchas otras marcas de whisky también han lanzado de cara a estas navidades sus respectivos packs y rediseños de botella y envase para seducir al consumidor. La razón por la que destacamos aquí a Cardhu es simplemente porque nos parecido muy atractivo y práctico el estuche de piel, y no supone un incremento significativo del precio de la botella.
Sin embargo el whisky no es la bebida estrella de las navidades. Ese honor está reservado a los cavas y champagnes. Y entre las marcas premium de esta categoría queremos hacer mención a Moët & Chandon y su curiosa edición Golden Jeroboam. No se trata de una añada especial, sino de un rediseño de su estuche para regalo (en esta ocasión han apostado por los tonos dorados). Pero lo más original de todo es que se trata de una botella personalizable, en el sentido de que dentro del estuche se incluye una pluma especial con la que se puede firmar la botella, estampar un dibujo o incluir una mención. De esta forma cada botella se convierte en un regalo único y muy personal. Eso sí, no está al alcance de cualquier bolsillo, ya que el precio de cada unidad es de 720 euros, incluyendo en el estuche un medallón dorado y un sello conmemorativo de esta edición especial. También se puede cambiar el champagne por el vodka, manteniendo el oro como protagonista, a través de esta edición de The Gold Standard, un vodka embotellado en oro de 24 kilates.
Para quien busque un auténtico regalo exclusivo sólo apto para coleccionistas, quizás encuentre estas navidades el regalo perfecto en este Chivas Regal Vivienne Westwood. Se trata de una edición del popular blended de Chivas 18 años cuya botella ha sido vestida, literalmente, por la diseñadora Vivienne Westwood. No es la primera ocasión en la que Chivas se asocia con un diseñador para crear un nuevo packaging de cara a una fecha señalada. Alexander McQueen o Christian Lacroix ya rediseñaron en su día la botella de esta destilería. Es una edición tan limitada que en España sólo se venderán 50 unidades. Por cierto, si el dinero no es problema, también podéis presumir de comprar una de las 999 botellas de vodka adornadas con cristales de Svarovski que están a la venta por un millón de euros cada una.
Más barato, y también más original, es una de las asociaciones de marcas más raras que han llegado al mercado últimamente. Se trata de unas zapatillas de deporte confeccionadas por Paredes y diseñadas por… DYC. Efectivamente, las Paredes DYC pueden constituir uno de los regalos más curiosos para estas navidades, dependiendo de los gustos de moda del destinatario. Según nos han informado desde la cuenta de Twitter de DYC, están a la venta en las tiendas Evo, Glass y Biguo de la calle Hortaleza de Madrid, y su precio de venta al público es de 70 euros.
Y si no os gusta el whisky, ni el vodka, ni el champagne ni tampoco las zapatillas de estilo urban casual, sino que lo que buscáis es simplemente tomar unas cervezas en buena compañía, Estrella Galicia también ha pensado en vosotros estas navidades con un nuevo envase especialmente diseñado para estas fechas.
La Navidad es la época por excelencia para el marketing de pruducto, y las marcas de destilados no son ajenos a las oportunidades que ofrece, así que el listado de packs especiales, productos promocionales y cofres especialmente diseñados para seducir a quienes buscan un regalo, o sencillamente quieren darse un capricho, es enorme. Aquí no caben todos, pero sí podemos ir añadiendo aquéllos que encontremos y que nos parezcan interesantes, como por ejemplo la idea de Martin Miller’s, que a la vista de la enorme variedad de elementos aromáticos que se utilizan para elaborar un gin-tonic, ha dedidido lanzar un pack donde, además de su afamada ginebra, incluye un frasco de granos de enebro y una cuchara trenzada para servir la tónica. Hemos visto este pack en Carrefour, aunque también se distribuye en otras cadenas de distribución, como El Corte Inglés. Su precio ronda los 35 euros.
Pero si lo que de verdad buscáis es un regalo exclusivo para el que precio no suponga un problema, The Macallan ha sacado este mes un whisky llamado The Macallan Lalique. Se trata nada menos que de un single malt de 60 años del que sólo se comercializan 400 unidades. Según informa la propia destilería, esta edición es el resultado de cinco barriles cuya fecha de llenado se remonta al 9 y el 10 de noviembre de 1950. El precio de cada una de las botellas, diseñadas por la casa de cristal Lalique, es de 15.400 euros. Todo un capricho para celebrar, por ejemplo, el Gordo de la Lotería de Navidad.