Una de las últimas tendencias que han irrumpido en los últimos años en el sector de la gastronomía es el “Do it yourself” (háztelo tú mismo). Lo vemos en actividades como los talleres para aprender a hacer cupcakes, el crecimiento de los clubes y sesiones para preparar cerveza artesanal en casa o, en lo que a coctelería se refiere, la proliferación de cursos para hacer bitters y siropes caseros, por poner un ejemplo. Hay quien ha trasladado esta tendencia al boom del gin-tónic. En los últimos dos años hemos asistido al lanzamiento de numerosos kits que enseñaban a combinar botánicos con cada ginebra. El siguiente giro de tuerca lo han dado compañías como Gin-Kit con el lanzamiento de alambiques que permiten destilar tu propia ginebra en casa.

Un momento, ¿destilar ginebra? ¿Acaso no conlleva eso un riesgo para la salud si no se tiene cuidado en el corte de las colas y cabezas durante el proceso de destilado? Pues sí, por eso mismo Gin Kit recomienda utilizar vodka neutro (ya destilado) como base a la que se le añadirán los botánicos que cada cual seleccione para destilar la mezcla en el alambique. “El corte de la cabeza y la cola es obligatorio si queremos obtener un producto de calidad Premium”, informan desde la compañía: “El usar vodka es por rapidez, seguridad y calidad. Queremos que la experiencia sea divertida y segura, y el proceso se simplifica mucho al utilizar alcohol puro de base (vodka, aunque valdría cualquier otro destilado ya apto para consumo humano con un destilado previo a la maceración), pues quita muchísimos quebraderos de cabeza”.

Gin Kit consiste en un alambique de cobre, un pack de botánicos para destilar junto con el aguardiente o vodka y las herramientas e instrucciones necesarias para llevar a cabo una destilación propia, controlando “el tiempo de maceración, la velocidad de destilación y el corte de las cabezas y colas”. Su precio es de 59,50 € en el mercado español.